“Vasos útiles en las manos de Dios”
📖 2 Timoteo 2:15, 20–21
En toda casa hay vasos distintos: unos de oro, otros de plata, y también de madera o de barro.
Todos están dentro de la misma casa… pero no todos son útiles para el mismo propósito.
Así es en la casa de Dios.
Algunos viven consagrados, otros mezclan lo santo con lo mundano.
Pero la buena noticia es esta:
“Si alguno se limpia de estas cosas, será un vaso para honra, santificado, útil para el Señor y preparado para toda buena obra.”
No se trata de ser perfecto, sino de estar limpio y disponible.
No todos los que están en la iglesia están listos para servir, pero todos pueden ser transformados si permiten que Dios los purifique.
🔥 No busques ser visto, busca ser aprobado por Dios.





