Existe una contradicción en la vida humana:
«CUANTO MÁS HAGO LO QUE QUIERO, MÁS TENGO LO QUE NO QUIERO»
Ya pensó en ¿cuál es el motivo del por qué usted hace lo que hace?
¿Lo hace por Dios o por usted mismo?
Humanamente hablando, si hacemos lo que queremos deberíamos alcanzar la felicidad que deseamos, pero hemos visto lo contrario.
Al leer en la Biblia la historia de Salomón, que dígase de paso fue el rey más sabio, ni antes ni después hubo otro igual a él. Pero, ¿a qué lo llevó esa sabiduría?
En lugar de honrar a Dios, hizo su propia voluntad, envaneciéndose, sin provecho alguno (Eclesiastés 2:4-11)
¿Por qué ocurre esto?
Porque nuestra voluntad está en contra nuestra, porque está llena de pecado.
Ante eso el antídoto está en entregarnos completamente a Dios.
Por eso, Jesús oró: “…no como yo quiero, sino como Tú quieras.” Mateo 26:39
Nuestros anhelos y deseos deben permanecer siempre en el altar, confiando en que la voluntad de Dios sea hecha en nuestra vida ya que esta es buena, agradable y perfecta.
📌 Templo de la Fe:
Comayagüela, 7ma calle entre la 4ta y 5ta avenida.
Le esperamos en este Miércoles en el Estudio Bíblico para continuar meditando en la voluntad de Dios para nosotros, especialmente a las 3 pm.








